Las calcificaciones en la rodilla son el resultado de una inflamación persistente en una zona específica, ya sea debido a la actividad laboral extenuante o al proceso natural de envejecimiento. Esta condición se desarrolla cuando el tejido sufre lesiones repetidas y no logra regenerarse adecuadamente, siendo reemplazado por tejidos duros. En este artículo, nos centraremos exclusivamente en comprender las calcificaciones que afectan la rodilla y cómo estas pueden generar molestias significativas en la vida cotidiana.
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¿Qué son las calcificaciones de la rodilla?
La calcificación en la rodilla es una lesión frecuente entre aquellos que practican deportes de forma regular. Esta afección provoca molestias considerables, limitando significativamente las actividades diarias de quienes la padecen.
En términos generales, la calcificación se manifiesta cuando cristales de calcio se depositan sobre el tendón de la articulación, endureciéndolo progresivamente. En la rodilla, es común que este proceso afecte al tendón rotuliano, disminuyendo su elasticidad y movilidad, y en algunos casos, provocando dolor que puede obstaculizar la práctica deportiva.
Causas de las calcificaciones en la rodilla:
Las calcificaciones en la rodilla pueden originarse por diversas razones, entre las que se incluyen:
Problemas alimentarios
Un exceso de consumo de ciertos tipos de alimentos puede conducir a la acumulación desmedida de cristales de calcio en el cuerpo. Esta acumulación, que el organismo no puede metabolizar correctamente, tiende a depositarse en los tejidos tendinosos o musculares, dando lugar a las calcificaciones.
Disminución del riego sanguíneo por envejecimiento
A medida que envejecemos, la circulación sanguínea puede disminuir, dificultando que los tejidos reciban el oxígeno necesario. Esto propicia la sustitución de tejidos por fibrosis, con la consiguiente deposición de cristales de calcio.
Sobrecargas repetidas y traumatismo
Lesiones mal curadas, como esguinces o microtraumatismos recurrentes, pueden desencadenar la calcificación. Además, los impactos repetidos durante la actividad física, como correr, pueden contribuir a la formación de estas lesiones.
Factores genéticos
La carga genética puede predisponer a ciertos individuos a desarrollar calcificaciones en la rodilla, convirtiéndolas en una condición más difícil de tratar.
Síntomas de las calcificaciones de rodilla
Los síntomas asociados con las calcificaciones en la rodilla, aunque no suelen ser graves, pueden limitar significativamente las actividades diarias. El dolor en la parte frontal de la rodilla, justo debajo de la rótula, es el síntoma más común. La inflamación, deformidades leves bajo la piel, debilidad muscular, calambres y un aumento anormal de la rotura del tendón o fracturas de hueso también pueden manifestarse.
Tratamiento de las calcificaciones en la rodilla
El tratamiento de las calcificaciones en el tendón rotuliano requiere la intervención de profesionales de la salud, como fisioterapeutas. Aunque los pacientes pueden aliviar el dolor e inflamación con antiinflamatorios y analgésicos, estos solo tratan los síntomas y no eliminan la calcificación.
Enfoques conservadores
- Terapia manual: Estiramientos y ejercicios para mantener la fuerza y el tono muscular.
- Electroterapia: Utilización de aparatos que ayudan en la destrucción y reabsorción del tejido calcificado.
- Ondas de choque: Aplicación de ondas para fragmentar los depósitos de calcio y favorecer su reabsorción.
- Iontoforesis: Aplicación de medicación analgésica local mediante corrientes para reducir el dolor e inflamación.
- Láser de baja potencia: Estimulación de la regeneración tisular con láser de baja potencia.
Tratamientos invasivos
- Infiltraciones de corticoides: En casos de dolor intenso y persistente.
- Artroscopia: Intervención quirúrgica para romper y limpiar el tejido calcificado cuando los tratamientos conservadores no son efectivos.
En conclusión, comprender las calcificaciones de la rodilla y sus distintas facetas es esencial para abordar esta molestia de manera efectiva. Antes de elegir un tratamiento, es más que recomendable consultar con un profesional de la salud para determinar la mejor estrategia según las necesidades específicas de cada paciente. En Omnicentro Fisioterapia disponemos del equipamiento y del conocimiento necesario para saber identificar las calcificaciones de la rodilla y su tratamiento en nuestro centro de fisioterapia de Ronda.
